El primer paso fue investigar sobre la historia que hay detrás del 8 de marzo. En uno de esos momentos en los que estábamos reunidas pensando qué hacer salió una mítica frase: “detrás de un gran hombre hay una gran mujer”.

Fueron palabras que, en pleno siglo XXI, nos molestó escuchar. Por todo ello, quisimos darle un sentido positivo, darle la vuelta a esta frase que tantas connotaciones negativas tiene. La idea era transmitir revolución, igualdad, lucha etcétera, pero sobre todo unión. Porque el 8 de marzo es un día para reivindicar, pero sobre todo es un día para celebrar todo lo que juntas, unidas, hemos conseguido a lo largo del tiempo. Y de aquí nace “Detrás de una mujer, estamos todas”.

Una vez conseguido el copy para la campaña, había que trabajar en la ilustración que lo acompañaría. Originariamente la idea surge de una tutoría con nuestra profesora. Mientras conversábamos y le presentamos lo que llevábamos hasta el momento, lo tuvimos claro y, basándonos en el propio texto, quisimos representar siluetas de mujeres seguidas de su 'sombra'. Sombras que vislumbran sus diferentes profesiones, pasiones, personalidades…

Usamos los colores institucionales del ayuntamiento, que contrastan con las tonalidades moradas. La línea color albero sirve para diferenciar las dos siluetas de las mujeres y a la vez para el 8 del 8M. El color burdeos lo llevan las mujeres en los labios. No es tampoco arbitrario. Desgraciadamente, los labios rojos históricamente han tenido connotaciones muy negativas y nosotras quisimos cambiar el guion y hacer de esos labios un símbolo de independencia, libertad y empoderamiento.

Para finalizar, quisimos reforzar nuestra cartelería y abrirla a la participación de los sevillanos con stickers que pudiesen usarse en WhatsApp. Se pueden encontrar escaneando el código QR adherido en la esquina.

Y eso es el feminismo, la unión de mujeres que persiguen la igualdad dadas de la mano. Por eso decimos que detrás de una mujer estamos todas, y sabemos, que, si una sufre, sufrimos todas, pero también que si una vence, vencemos todas.

Pero las siluetas representadas no han sido escogidas al azar. Tienen un porqué. La deportista: el deporte es un ámbito en el que la mujer poco a poco va creciendo, pero es algo “actual'', además los juegos olímpicos son aún recientes. Igual pasa con la ingeniera, ya que es un ámbito en el que poco a poco nos vamos haciendo notar, pero en el que la figura de la mujer siempre ha estado opacada e infravalorada. Por su parte, la sanitaria ha sido escogida por su esencial y valiente papel en estos dos últimos años debido a la situación que estamos atravesando con el Covid. Ya para terminar, la revolucionaria, porque era necesario sacar a relucir el espíritu revolucionario que tenemos todas dentro y que se acentúa más en días como el 8M.

Con respecto a la composición, quisimos ser lo más fieles posible al día de la Mujer y que cualquier persona que pasease por la calle, viendo únicamente la parte gráfica, fuese capaz identificar nuestros carteles con este día. Teníamos claro que el color violeta debía predominar y fuimos combinando distintos tonos hasta que nos gustó la armonía que creaban.

Al ser un proyecto para el Ayuntamiento de Sevilla, queríamos que también estuviesen presentes en la campaña. Por eso, el ocho del 8M es el Nodo. La posición del número tampoco es aleatoria y, al estar volcado, forma un infinito. Con ello queríamos representar que todos los días deben ser el Día de la Mujer.