Un novelista en secretaría

Joaquín González Roncero es responsable de Títulos en la Secretaría de la Escuela Técnica Superior de Arquitectura. Pero, más allá de su trabajo administrativo, su espíritu creativo lo ha llevado a explorar otros muchos campos. El último fruto de esta inquietud creadora es su segunda novela: El manuscrito del Nilo, publicada por la editorial Círculo Rojo.

Según él mismo explica, no se trata de una continuación de su primer libro, Las lágrimas de Dios, sino de “un complemento” que le ha permitido “terminar de contar una gran parte de la historia que, por diversas razones, no habían tenido cabida en la primera novela”. La inspiración para este primer libro le llegó en una experiencia ligada con otra de sus pasiones, la fotografía. En el año 2003, se encontraba cubriendo fotográficamente la evolución de una intervención arqueológica en la Catedral de Sevilla, concretamente en la Capilla de San Hermenegildo. “Al igual que otras noches, en la del día 16 de noviembre de 2003, acudí a la zona de trabajo, donde ya me habían avisado que encontraría algo muy especial. Efectivamente allí estaban perfectamente ordenados los restos óseos de una mujer relativamente joven y un bebé que, presumiblemente, habían muerto de manera traumática”, recuerda. “En la soledad de la capilla, esa visión desencadenó toda la trama de Las lágrimas de Dios”.

El manuscrito del Nilo ha supuesto un trabajo arduo y prolongado, tanto de documentación como de imaginación para lograr que no hubiera fisuras entre ambos argumentos. “Para quien ya haya leído Las lágrimas de Dios, esta nueva novela no puede ser repetitiva en ningún aspecto, sino que debe actuar de manera complementaria al relato anterior, a la vez que lo enriquece y dota de mayor contenido. Sin embargo, para los que no hayan tenido la oportunidad de leer la primera novela, El manuscrito del Nilo ha de tener la capacidad necesaria para hacer entendible todo el recorrido de la trama”, comenta el autor.

Su próxima novela, que ya ha comenzado a escribir, abandonará este argumento y sus personajes

El manuscrito del Nilo cuenta la historia de un grupo de personajes distantes en el tiempo y el espacio, pasando por Sevilla, Egipto o la Ciudad del Vaticano, pero aparentemente unidos por un vínculo, comprometidos con una causa común manuscrita sobre unas hojillas de pergamino. Todos ellos se verán abocados a preservar ese legado, sin conocer la trascendencia del papel que les ha reservado la historia.

Su próxima novela, que ya ha comenzado a escribir, abandonará este argumento y sus personajes, en lo que el autor define como “otra forma de afrontar la novela histórica”, pero volverá a llevar a sus lectores a tierras lejanas – “quizá Egipto”, apunta – para descubrir secretos que han quedado ocultos a lo largo de la Historia. “Tendrá una base histórica, pero será totalmente diferente a estas dos”, avanza.

El manuscrito del Nilo ha supuesto un trabajo arduo y prolongado, tanto de documentación como de imaginación

Portada de la segunda novela de Joaquín González Roncero

Más allá de la novela
Junto a su labor literaria, Joaquín avanza que seguirá cultivando sus otras grandes aficiones, como la fotografía o el diseño creativo, en las que también es bastante prolífico: desde el año 1992 ha colaborado como freelance con la Catedral de Sevilla en la ejecución de fotografía técnica relacionada con la evolución y conservación del propio edificio y ha realizado distintas exposiciones fotográficas relacionadas con la arquitectura.